lunes, 2 de febrero de 2009




No respondas, no te enojes. Ya me resigne a vos, a no tenerte. No puedo. No queres. Supongo que es eso lo que querés que haga; me ahogo en el vaso! ¿Sabés? El corazón esta hecho para romperse. Pero vamos! Volvamos a intentarlo, no importa si no sale como lo planeabamos. Aca tenes un nuevo pedazo de mi corazón: destrozalo!